Fondue: Hecho en Suiza

Comenzar la velada con una degustación de quesos suizos enteros o fundidos es una excelente forma de abrir el apetito a los comensales. Realmente se puede decir que estos productos son exquisitos y que merecen ser acompañados con ingredientes de primera calidad. Una copa de un buen vino tinto, un ambiente acogedor y una agradable compañía harán sentir al invitado en su casa. Presente de entrada la ensalada que aparece a continuación, o bien el exquisito fondue de queso y verá que será la mejor antesala para pasar al plato fuerte: un rico fondue bourguignonne, otra receta típica de la gastronomía suiza.

Ensalada de queso de Gruyére con vinagreta de mostaza

Ingredientes (6 personas) 300 g de queso de Gruyére picado en trozos 300 g de jamón de pierna cortado en cuadritos 1 paquete de cebollines picados 12 pepinillos encurtidos picados Ciboulette para adornar 2 cdas. de perejil picado Hojas de lechuga para adornar Vinagreta basada en mostaza de Dijon 1/2 taza de aceite de oliva 1/4 taza de vinagre de vino blanco 1 cda. de mostaza de Dijon 1/2 cdta. de sal Pimienta negra recién molida Preparacion Cortar el queso de Gruyére en trocitos. Cortar el jamón, los cebollines y los pepinillos en encurtidos en cuadritos. Unir los ingredientes anteriores en una ensaladera, junto con el perejil y el ciboulette picados. Preparar la vinagreta uniendo todos los ingredientes. Sazonar la ensalada una hora antes de servir. Se puede servir sobre unas hojas de lechuga. Adornar con hojas de perejil o ciboulettes.

Fondue de queso

Ingredientes (6 personas) 500 g de queso de Gruyére 300 g de queso emmental 1 1/2 tazas de vino blanco seco 1 diente de ajo machacado l 1 cda. de maicena Sal y pimienta negra recién molida al gusto 1 pizca de nuez moscada 1/2 taza de kirsch (licor de cereza) 2 canillas cortadas en trozos l Flores de brócolis Hongos frescos Salchichas Papitas hervidas pequeñas Preparacion Rallar los quesos. Frotar con el ajo machacado el interior de la olla donde se va a cocinar el fondue. Verter el vino en la olla, agregar la maicena y el queso rallado. Derretir a fuego bajo. Revolver continuamente con una cuchara de madera. Agregar sal y pimienta al gusto. Verter el kirsch y añadir la nuez moscada rallada. Servir bien caliente. Acompañar con el pan de canilla, las papitas hervidas, las salchichas cocinadas y picadas en trozos, las flores de brócoli y los hongos frescos.

Queso emmental Para los suizos sus quesos son los mejores del mundo, pero el más insigne de todos es el emmental. Se caracteriza por su sabor dulce y amargo a la vez. Su nombre proviene del valle de Emmen, situado en el cantón de Berna, donde comenzó muchos años atrás su fabricación. Su proceso de maduración suele durar varios meses y mejora su calidad mientras más tiempo pasa en ese proceso. Posee agujeros pronunciados, más grandes que los del queso de Gruyére, el cual proviene de la zona de Friburgo y es también uno de los más reconocidos en el mundo. Con el tiempo, otros países fueron copiando estos productos lácteos, lo que motivó a los suizos a diferenciar el queso elaborado en sus fronteras con la denominación Switzerland y un sello de la Unión Quesera Helvética impreso sobre su corteza.